Agua de Mar: Un océano de Salud por descubrir

La ciencia ha demostrado que la vida tiene una procedencia marina, de hecho, el agua de mar tiene una composición química muy parecida al plasma sanguíneo, por eso los expertos coinciden en que es muy beneficiosa para los seres vivos.

El agua, esa gran grabadora biológica que tiene capacidad ilimitada para tomar toda la información cuántica del universo. 

He aquí la gran solución a todos nuestros desequilibrios y la gran sanadora.

El concepto de agua mineromedicinal, aplicable al agua de mar más que a ninguna otra, es tan antiguo como la humanidad.

Desde la cultura griega, pasando por la egipcia, la persa, la hinduista, la africana, la tibetana, y hasta la china, todas y cada una de ellas le han dado una especial atención, dado que por su composición orgánica es 100% biodisponible, lo que garantiza la total disponibilidad bioquímica de los elementos para nuestro organismo, en cuanto toca la mucosa de la boca.

El emperador de China Fu-Shi, conocido como el padre de la medicina marina, fue el primero en considerar las virtudes medicinales del agua de mar. 

Los druidas trabajaban enormemente con los ríos, los cuales les atribuían curaciones mágicas y milagrosas. 

En Macedonia se tenía la costumbre de meter en baño de agua fría a las mujeres que acababan de parir para evitar hemorragias masivas y relajar también el tejido inflamado. 

Los griegos fueron unos de los que más investigaron la hidroterapia y sus virtudes, como no, el mayor investigador fue Hipócrates. Formaba parte del trabajo con la energía de Esculapio, Dios griego de la medicina. 

Pitágoras trabajaba con los baños de agua fría y dieta vegetariana para mantener una mente clara. 

También los Incas tenían una gran sabiduría del agua, conociendo las propiedades del agua de las cascadas ricas en minerales y azufres, aguas que también calentaban y aplicaban para dolores, inflamaciones, desequilibrios inmunológicos, roturas, envenenamientos, etc.

La quimiosíntesis es un fenómeno parecido a la fotosíntesis pero en el mar, que ayuda a convertir los minerales inorgánicos en nutrientes orgánicos o biodisponibles. Este hecho es muy significativo puesto que los minerales del agua común que consumimos no son orgánicos y por lo tanto tampoco biodisponibles, el agua marina nos aporta oxígeno, mejor conducción de la información en nuestras células, hidratación, y nos aporta nutrientes orgánicos biodisponibles con toda la tabla periódica. 

Por tanto, tienes a tu alcance uno de los mejores tratamientos que existe en la tierra, la más completa de las aguas minerales, puesto que contiene la totalidad de los elementos de la Tabla periódica que se encuentran en la tierra, y que forman parte de todos los seres vivos. Indispensables por tanto para que nuestro organismo funcione a la perfección.

Dicho esto te aconsejo tomar tres precauciones antes de dar el paso:

Se puede tomar de forma isotónica o hipertónica:

También se puede comprar en centros especializados donde las envasan libres de Bisfenol, tóxicos y metales pesados, aunque es cierto que en ese proceso de filtraje se elimina el fitoplancton, que tiene un gran potencial de regeneración en nuestro organismo.

Para apoyar esta afirmación, Mariano Arnal, co-fundador de la Fundación Aquamaris, con sede en Badalona (Barcelona), se vale de sus años de investigación sobre los beneficios del agua de mar para la salud, pero también ha experimentado en sus propias carnes dos naufragios voluntarios.

Hace ya diez años, durante una Semana Santa, Mariano Arnal se subió a un barco prestado por una cofradía de pescadores, junto al Doctor Angel Gracia, otro conocido promotor de la cultura del agua de mar. Su ayuno total, excepto de agua de mar, duró unos 4 días, tiempo en que la embarcación permaneció anclada al último pantalán flotante de un puerto de Fuerteventura, aislados de tierra. Las autoridades marítimas no les dejaron emprender su aventura en alta mar, pero lo importante era resistir con solo la ingesta de agua de mar.

Meses después, repitió la experiencia en el mismo lugar y condiciones, pero esa vez se sumaron cinco personas, de las cuales resistieron hasta el séptimo día solo dos. El propio Mariano y su compañero, Hernando Franco, que era la primera vez que bebía agua de mar. Sufrió fuertes diarreas, pero resistió hasta el final. Ahora Mariano afirma haber aprendido la lección. Dice que cada estómago es diferente, pero que, en cualquier caso, lo mejor es beber el agua a chupitos, saborearla varios minutos en la boca para que se diluya con la saliva y después tragarla. Así se logra un doble efecto: hidratar y nutrir.

Si solo te alimentas con agua de mar, pierdes peso. Mariano perdió alrededor de 8 kilos en 7 días, pero no sufrió desnutrición. Todo lo contrario. El cimiento de la nutrición, recuerda, son los minerales, y el agua de mar contiene 95 de los minerales de la Tabla Periódica, según ha descubierto una universidad de Tokio.

Además, el Agua de Mar, posee mucho hierro, vale para purga o laxantes, te aporta sal natural, sirve de dentífrico y colutorio (para enjuagarse), alcaliniza tu organismo, es isotónica (repone energía para esfuerzos, deportistas) ya que contiene hasta 118 electrolitos (comparados con los 12 o menos que ofrecen las bebidas isotónicas del mercado), es desinfectante, antibiótica, limpia, combate el mal aliento, te cura la anemia, te mineraliza, ayuda a la asimilación sublingual (esto favorece la absorción de ciertas sustancias), es un purificador estomacal, cicatrizante, es reconstituyente de primera, adelgaza y calma el hambre, nutre las células, depura… y muchas cosas más.

El agua de mar refuerza el sistema inmune.

Una investigación realizada por científicos de la Universidad de Alicante, grupo que dirige el Dr. José Miguel Sempere, en colaboración con los Laboratorios Quinton, ha revelado que el Agua de Mar, que contiene numerosos elementos minerales antioxidantes e inmunomoduladores, tiene efectos beneficiosos claros para la salud. La investigación constató que esta agua fomenta la inmunidad celular y activa el sistema inmunológico general.

Ministerio de Salud de Nicaragua implementará agua de mar con fines terapéuticos.

En enero del año pasado, el Minsa ha establecido coordinaciones con la doctora María Teresa Ilari Valenti, especialista en el uso de terapia del mar, con el objetivo de desarrollar capacidades humanas en el uso de esta técnica e incorporarla al Modelo de Salud Familiar y Comunitaria.

“Vamos a desarrollar en conjunto un plan docente. Nosotros queremos reconocer la abnegación, la dedicación con la que ha trabajado la doctora María Teresa Ilari Valenti en el uso de la terapia con agua de mar en nuestro país, un verdadero apostolado que reconocemos, valoramos, apreciamos grandemente, y estamos incorporando todo su conocimiento y su dedicación a nuestro Modelo de Salud Familiar y Comunitaria”.

“Se va a elaborar una normativa para el uso del agua de mar para la formación de fitoterapeutas clínicos, un plan de comunicación para que la población se apropie de los beneficios del agua de mar”.

Mensajes del Agua - Documental del Dr. Masaru Emoto.

Masaru Emoto nació en Yokohama en Japón y fué doctor diplomado y licenciado en Medicina Alternativa por la Universidad Internacional Abierta. 

Se hizo famoso por sus experimentos en los que afirma que el agua tiene una consciencia que refleja nuestro pensamiento, palabras y el entorno donde estamos, y que si tomamos agua con una estructura interna armónica, eso beneficiará y sanará a nuestro cuerpo.

Si quieres investigar más por tu cuenta, un buen lugar para empezar es en Aquamaris.org, donde encontrarás gran información teórico-práctica del agua de mar.